jueves, 26 de febrero de 2009

La vida es bella a veces






Cada vez que veo los informativos me entra un terrible desasosiego, las noticias me hacen saltar de un estado a otro, siento rabia por las barbaridades que se cometen, ira con las injusticias, pena por las desgracias y un absoluto rechazo por la politica y por el morbo salvaje de los medios de comunicacion.



Por ello ha decidido no volver a verlos ni escucharlos, alguien puede decir que es una actitud cobarde o pasota pero.... de que sirve sufrir cuando no puedes cambiarlo ? No lo estaremos fomentando todos prestandole tanta atencion? Acaso no pasan cosas buenas en el mundo cada dia? Por que de eso no hablan los informativos?


A continuacion os dejo un interesante articulo que encontre en la red :

¿Somos los seres humanos realmente tan inteligentes?
¿Habéis visto a las hormigas? Os lo creáis o no, son más inteligentes que las personas. Sí, ¡¡lo son!!
Jamás he visto a una hormiga que se encuentre con una piedra que le está obstaculizando para conseguir su alimento y, se dedique a insultarla, se enfade con ella, le grite, la enjuicie, le explique que no tiene razón de estar ahí en medio, le diga cosas como:
—¡Eh tú, piedra, tú “no deberías” estar ahí! Estás interrumpiendo mi camino, estás en el lugar equivocado, ¿quién te has creído que eres?!
¿Ridículo verdad? Debe serlo, al fin y al cabo eso es lo que hacemos los seres humanos.
A diario nos encontramos piedras en nuestro camino (situaciones problemáticas, obstáculos, personas que nos dificultan en alcanzar nuestras metas… ) y ¿qué hacemos?: quejarnos, enjuiciar a los demás, demostrar que se equivocan, que llevamos la razón, decirles que “no deberian” ser así… ¡bla, bla, bla, porque… bla, bla, bla!
Sí, así llenamos nuestro tiempo, examinando y evaluando “lo defectuoso” de la vida y de las personas, olvidándonos de cuáles son nuestras metas, nuestras ilusiones, lo que amamos, lo que nos llena, lo que nos desarrolla, en definitiva, lo que SÍ nos hace felices.
Una hormiga, una simple hormiga, con 1/100 de cerebro con respecto al del ser humano (de tamaño, aclaro) rodea la piedra, busca otros caminos, soluciona y, no pierde un solo minuto en quejarse, se centra en lo importante, en su meta, en lo que SÍ quiere, NO en lo que odia, NO en los obstáculos, NO en las piedras; nada de juicios, nada de “no deberían” ser las cosas así, las personas así, las situaciones así, etc.
Una hormiga soluciona y no se queja, ella puede hacerlo… y lo hace, ¿y tú?
Saludos
Alberto Hidalgo. Psicólogo Colegiado nº: 1646 Tlfno: 628490303



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